La biografía es la historia de la vida de una persona narrada desde su nacimiento hasta su muerte. 
Acá se hará referencia a una persona que aún vive por lo tanto esta no es una típica biografía.
Primero situémonos en la época en que nació esta mujer: 16 de junio de 1944.
¿Qué pasó ese día?
En Inglaterra: primer bombardeo alemán. 
La prensa alemana llama al ataque sobre Londres "El comienzo del día de la venganza". 
Es el principio de la ofensiva aérea contra Gran Bretaña, 95 bombas volantes cruzaron ese día el canal de la Mancha. 
Las bombas volantes tienen una autonomía de 242 kilómetros, una velocidad de 564 kilómetros por hora y una carga explosiva de 908 kilogramos
En Saipán los marines americanos rechazan el contraataque japonés.
En Italia el 8º Ejército captura Foligno y Spoleto, al este de Ovrieto.
En Montevideo, nace Stella Maris. Médicos, enfermeras, madre y padre la miran asombrados pues tiene muy abiertos sus grandes ojos claros.
Fue una niña alegre, dócil, tranquila y, según su abuela; chúcara.
Le gustaba meterse detrás de los sillones del living, cuando había visitas, y muy quieta escuchar y observar todo.
Desde los 4 y hasta los 17 años se educó en diferentes colegios de religiosas. 
Fue allí donde demostró, por primera vez, su original forma de pensamiento: en medio de la clase de catecismo preguntó si Dios estaba en el infierno. 
La monja espantada quiso saber cómo se le había ocurrido tamaña herejía. 
Ella explicó que: Usted dijo que Dios está en todas partes, así que tiene que estar en el infierno- Al rezar usted dice que Jesús “muerto y sepultado descendió a los infiernos”.
Cómo este punto nunca le fue aclarado, la inquietud permaneció en ella y le llevó a pensar que sus padres y maestros no ponían atención en lo que decían sino que repetían, eso hizo que perdieran autoridad frente a sus ojos. 
Así que desde ahí deja de confiar en la gente y comienza a buscar respuestas por su cuenta (al momento de escribirse esta biografía sigue buscando)
Desde temprana edad demostró que le era fácil anticipar sucesos. Por lo tanto la consultaban: Nena ¿va a llover el domingo?, por ejemplo, cuando se planeaba un asado. ¿Podés fijarte si fulanita está embarazada?, cuando los novios regresaban de la luna de miel.
Como su madre declaró: Tú sabés porque sos observadora, ella tomó estos hechos con naturalidad, hasta que instalaron el teléfono y comenzó a avisar para quién era la llamada, antes de que atendieran.
A los 15 años se ennovió con el chico de enfrente, cosa que habían vaticinado casi todos los vecinos. Hasta ahora tiene sus dudas sobre si fue hipnotizada, convencida o presionada, por todas las viejas del barrio. El barrio encantado.
A los 17 años viaja a Buenos Aires con su familia y se radica allí. 
Esto pone fin a la relación amorosa, el barrio decepcionado la ve partir.
A los 19 años muere su padre y regresa la familia a Montevideo. 
El barrio suspira esperanzado y ¡sí! se reencuentra con el chico de enfrente.
A los 20 años se casan ¡todo el barrio va a la ceremonia!, a la fiesta no porque estaban de luto, ella, el barrio estaba chocho, máxime porque se queda a vivir ¡en el barrio!
A los 21 años tiene su primera hija.
A los 23 tiene su segunda hija.
A los 24 tiene su primer hijo.
A los 25 tiene su cuarta, tercera, hija.
Con gran felicidad y maestría mantiene organizadamente sus tareas de madre, esposa, ama de casa. Esposa, ama de casa, madre. Ama de casa, madre, esposa…persona no, por falta de tiempo. 
Es feliz, se siente plena y planea el futuro.
Su marido es un destacado periodista, tiene status y buen sueldo.
Los niños son bellos y sanos.
La casa luce impecable.
Las amigas vienen a tomar el té.
Todo según sus ilusiones.
Es una esposa, una madre, un ama de casa con mucama y jardinero, tiene su lugar en la sociedad.
Un domingo, luego de que su marido se fuera a la redacción donde trabaja y mientras los niños duermen la siesta, aparece la policía a allanar la casa. 
El barrio mira desconcertado aquella intrusión, aquella foránea marea azul que le invade. 
El marido está preso, es un militante del MNL y lo han descubierto.
Ahora es una esposa de preso político, una madre sola, un ama de casa sin dinero,  ni mucama, ni jardinero que tiene muy otro lugar en la sociedad.
El barrio se borra.
Comienza a trabajar en periodismo en el Diario Ya, allí toma contacto con la lucha sindical, la defensa de la libertad de palabra y es testigo de injusticias y de la pérdida de los valores de la sociedad.
Ahora no es esposa, es madre de a ratos y ama de casa a los ponchazos.
Clausurado el diario se une al Movimiento 26 de Marzo y se hace más consciente de la agitación y reclamos, pérdidas e injusticias que están cambiando la cara de La Suiza de América.
Sobreviene la justicia militar y aparecen los soldados en su casa, esta vez se la llevan a ella.
Pasa un año de recorrida por varios cuarteles y una cárcel militar.
Tiene la oportunidad de establecer contacto con gente que pertenece a círculos sociales muy diversos, que tiene fuertes posturas políticas, que cree en camaradería de armas. Toma contacto con la tortura y la censura y adopta, por fin, una postura.
Es consciente de la total indefensión en que se encuentra y descubre su fortaleza, su temple y su humor negro. 
A modo de cartas escribe, desde los cuarteles, a sus hijos un cuento por semana, dando de esta forma el primer paso como escritora.
Ahora no ejerce como  madre, ni como ama de casa, está sin casa y sin hijos. Y todo por ser la esposa de… esto le aclara los valores en cuanto a la Justicia Militar se trata.
Luego de vivir un año entre cuarteles y cárceles, sale totalmente cambiada.
Aquella chica de colegio de monjas, aquella ama de casa “de barrio” ya no existe más.
La madre sale agrandada y cuando, por fin, puede abrazar a sus hijos se da cuenta que le crecieron los brazos y la fortaleza.
Emigra a Buenos Aires con sus 4 hijos y allí comienza la carrera con correctora. Primero es el diario La Calle, una publicación matutina, por lo tanto sale a trabajar cuando los otros se van a dormir. Le crea algunos problemas decir que corrige La Calle de noche, la gente malinterpreta.
Trabaja en editoriales como Emece, Esquiu, diarios como Clarín y La Nación, revistas como Confirmado, semanarios como La prensa económica, en fin trabaja fuera de casa, como correctora.
Llega a casa a trabajar como ama de casa y con una mano enciende la cocina y con la otra el  lavarropas. 
Cena trabajando de madre: escucha los planteos de sus hijos: Que para matemáticas necesito un cuaderno, que la maestra dice que vayas, que perdí el saquito, que me invitaron a un cumpleaños comprá el regalo, que…
Y no trabaja de mujer, disfruta de serlo. Así que se las ingenia para maquillarse en el subterráneo, arreglarse el cabello en el baño de la empresa, conseguir algún… ¿cómo llamarle?, ¿amor pasajero? entre los compañeros de trabajo.
Consideremos que en Buenos Aires años 70-80 una mujer con 4 hijos no cotizaba en el mercado de “novias”.
Del año que pasó presa le quedaron los cuentos, mejor dicho la habilidad para escribir cuentos.
Y dos de sus cuentos son publicados en el Suplemento Infantil de La Nación.
De regreso en Montevideo, en 1985, comienza a trabajar en CBA, donde corrige Brecha, Las Bases, Nueva Viola, Guambia y varias publicaciones más.
Siempre sostuvo que “En casa se come de mis ojos, si no leo, no comemos”
Impulsada por el hambre, porque los hijos son adolescente y ¡cómo comen los adolescentes! pregunta qué otra cosa puede hacer. Es ahí que le proponen que escriba.
Ella acepta el desafío y nace Chichí, en 1986, columna de periodismo de humor que aún hoy escribe y que se paseó por Guambia, Berp!, Al rojo vivo, El cordón Post, 50-60, entre otras publicaciones. 
Hace entrevistas a artistas para, La República, escribe un libro sobre Alba Roballo.
Abandona el periodismo abruptamente, es que la echan de La República (un despido más de este diario y van ¿cuántos despedidos?) 
Recibe una oferta del restaurante Galileo para que lea las cartas del Tarot a los comensales y ése es el punto de partida de su carrera como vidente, bah como que retoma a la bruja que en realidad es de nacimiento.
Interpretando el tarot angélico trabaja en Ciudad Boliche, La Creperie, Lo de Paco, Don Peperone, tiene un programa de radio en X FM, luego en CX40 Fénix y Océano. Sale al aire en dos radios de Pando. Lo de bruja funciona…
Comienza con los talleres de crecimiento, de Tarot y lecturas personales.
Todo marcha sobre alas de ángeles hasta que llega al gobierno de Jorge Batlle y la carestía pimpante deambula por el país. Habiendo hambre no da para indagar en el futuro y los clientes desaparecen.
Tuvo un  periódico, El Cordón Post, que editó durante 1992. 
Suspendió todo porque se enamoró de un argentino y se fue tras él, llena de ilusiones.
Regresó año y medio después con una valija llena de ilusiones rotas.
Ahora no era madre sino abuela, no era esposa ni novia, tampoco ama de casa porque no tenía casa.
Con creatividad propia y la generosidad de sus hijos, fue rehaciendo su vida, se establece, consigue una computadora y abre su vida al mundo.
Comienza a guiar por internet un grupo de crecimiento espiritual, a leer las cartas en Skype, a restaurar fotos usando Photoshop.
Maravillada experimenta la realidad de un mundo sin fronteras.
Dejó atrás a la esposaamadecasamadre y se convirtió en habitante del planeta que  planea por el ciberespacio.
Votada que se hubo la Ley, consiguió la Pensión Reparatoria como Víctima de Terrorismo de Estado, que vino a repararle el presupuesto y el alma “Me jubilé de presa política” dice y de alguna forma eso la reivindica.
Encontró, de aburrida que estaba, un taller de narración. 
Allí descubrió que contando cuentos, cosa que había hecho toda su vida, se podía una ganar la vida.
Y se inscribió en festivales y allá se fue a Buga, a Cartagena de Indias, a Quito, a Guaranda, a Neiva…cuenta que te cuenta feliz y contenta, los cuentos de su autoría,  hasta que sacó la cuenta de que lo que ganaba no daba para nada y decidió aquietarse un poco.
Un día vio, desde su balcón, que había un grupo de personas en la explanada de la Intendencia, bajó y se encontró con mujeres vestidas de negro portando pancartas con nombres de mujeres asesinadas, víctimas de la violencia de género, averiguó, se solidarizó y se unió al grupo Mujeres de negro. 
Así que ahora hace performances, marchas, plantones silenciosos, vestida de negro y en un aporte hacia la toma de conciencia para erradicar la violencia doméstica.
Descubrió en Facebook un taller de escritura y pensó que, con los años que llevaba escribiendo, nunca nadie le había enseñado nada. 
Para dejar de ser silvestre, se anotó, lo toma, viendo si logra entender la poesía…
Aclaro: si logra entender la poesía de poetas porque…la poesía de la vida…esa la tiene bien sabida.
Ingresa en la Red de Equidad y Género del Municipio B, se une a un grupo, del Departamento de Deportes de la IM, que hace gimnasia en una plaza, se inscribe en la UNI3, donde hace teatro y biodanza. Se postula para concejal vecinal y ¡sale electa!
Ahora es una mujer politizada, abuela sui géneris, amiga de miles.
Tiene su página en Facebook, como miembro de la Comisión de comunicación del Concejo Vecinal, publica notas y fotos de diferentes eventos.
O sea que salvo novio tiene muchas cosas que siempre quiso tener en su vida.
Llegado el Coronavirus, decida aportar sonrisas y entretenimiento publicando un cuento suyo por día.

Se asocia con su nieta y sale al mundo cibernético esta página que estás leyendo.